Quiero compartirte algo que tal vez ya has escuchado, pero es una información que muchas veces “se consume con avidez y se olvida con rapidez” (frase de Chamalú).
Cuando empecé a tener mayor consciencia que soy energía (¿has experimentado esto?), que lo que existe a mi alrededor también lo es, incluyendo objetos, plantas, animales y demás, comprendí que tengo una gran responsabilidad conmigo misma y con mi entorno: mantener el enfoque y el estado de presencia para identificar en qué nivel de energía estoy vibrando y por lo tanto que estoy atrayendo.
Evalúa en qué momento de tu vida estás

Y no es difícil saber esto, si en este momento sientes que absolutamente todo en tu vida es un caos podrás comprender que tu energía está en un nivel bajo de vibración, pero esto no es motivo para sentirse preocupado ni culpable, por el contrario, es una gran oportunidad para que a partir de ahora mismo puedas empezar a tomar acción y hacer todo aquello que sientas que puede apoyarte en este propósito de elevar tu energía.
Por el contrario, si en varias áreas de tu vida sientes plenitud, ¡qué bien!, porque eso mismo que estás haciendo para esas áreas puedes aplicarlo para las demás en las que sientas que no hay completa armonía.
En el punto donde te encuentres hoy, quiero compartirte 3 formas con las que trabajo mi energía. ¿Y por qué hacerlo? Justamente como te he dicho antes, porque al elevar tu vibración atraes lo que deseas manifestar.
Aquí están esas tres formas

Empiezo mi día haciendo consciencia de mi respiración, agradezco, luego hago una meditación para conectarme con el momento presente y tener una intención clara en el día y posteriormente hago estiramientos que me permitan liberar de mi cuerpo aquella energía estancada y empezar renovada. Esta es mi forma de hacerlo, pero es importante que crees la que sientas que funciona para ti, siempre manteniendo la intención de empoderar tu energía para ese nuevo día.

Uso mis cristales. Cada uno de ellos tiene personalidades distintas que poco a poco me han venido mostrando y enseñando, así que diariamente trabajo con ellos y cuando necesito un extra de energía para algo en particular hago rejillas o trabajo combinaciones de cristales en meditación.
Si quieres saber más de la energía de los cristales tenemos dos programas para ti, el básico y el avanzado.

He venido aprendiendo cómo respirar mejor. Los niños cuando respiran expanden su barriguita, porque saben hacerlo aprovechando su máxima capacidad. A medida que vamos creciendo pareciera que las ocupaciones y las carreras del día a día, nos hacen respirar más rápido y menos profundo. Así que tomarse unos momentos del día para hacerlo profunda y conscientemente es muy poderoso para elevar la energía. Te dejo un video de una mujer que admiro, María Fernanda Escobar, ella te guiará en cómo hacerlo. Da click aquí.
¿Esto quiere decir entonces que todo el tiempo debes sentirte bien? No. Mi invitación es a que seas más consciente de lo que estás experimentando y que cuentes con herramientas para que poco a poco vayas encontrando el equilibrio, como acto de amor por ti.
Si alguna o algunas de estas formas que te comparto te interesa empezar a practicarlas, simplemente hazlo desde hoy, no esperes el momento perfecto, ni cuando algo extraordinario pase, regálate ese espacio donde te empoderas de tu energía y atraes solamente aquello que deseas.
¡Cuéntame cómo te va!
Bendiciones hermoso ángel cristalino.
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